No es lo mismo. La gran diferencia es que una donación otorga un beneficio tributario a la organización que realiza el aporte, ya que el donatario se encuentra acogido a una ley de donaciones, quien emite un certificado de donación al donante por el financiamiento recibido.
Un auspicio en cambio, debe ser necesariamente facturado y permite una retribución o contraprestación para la marca auspiciadora.
Una Donación es el aporte realizado por un sujeto o una organización que implica el apoyo económico, ya sea total o parcial, de algún proyecto o evento teniendo como objetivo principal apoyar causas sociales, culturales y educacionales.
Un auspicio es el aporte comercial total o parcial –sujeto a facturación- que realiza una empresa para financiar la realización de un evento, ceremonia o programa, por cuyo efecto recibe a cambio imagen y notoriedad, a través de los soportes comunicativos que permitan su difusión.