El crecimiento personal y profesional de los colaboradores de una empresa es cada día más importante para su desarrollo. No solo porque permite enfrentar de mejor forma un escenario de cambio constante, sino también porque redunda en una serie de beneficios. Entre estos, mayor satisfacción laboral y moral, mayor motivación, mayor capacidad para adoptar nuevas tecnologías y menor rotación.

Diferentes estudios han revelado que la mayoría de los colaboradores esperan recibir herramientas de formación laboral en la empresa para la que se desempeñan. “Los mejores talentos buscan capacitación para avanzar en sus carreras. Si no la proporcionas, tu competencia lo hará. Nuestra última investigación encontró que el 65% de todos los empleados esperan recibir orientación profesional de sus gerentes y otros líderes”, dice Stacey Force, vicepresidenta de marketing global de Manpower Group.

Estos datos son coherentes con la encuesta mundial de LinkedIn "¿Cómo y por qué los trabajadores cambian de empleo?", la cual mostró que el 45% de los encuestados abandonó sus trabajos al estar preocupados por la falta de oportunidades para progresar.

En Chile, empresas como Falabella y Bci desarrollan diversas estrategias en este sentido. “Creemos firmemente que los colaboradores son el motor del crecimiento y estamos comprometidos con impulsar y motivar su desarrollo continuo. Siempre estamos innovando en programas y procesos que impulsan la autogestión y la retroalimentación”, afirma Felipe Alvarado, gerente de formación y aprendizaje de Bci.

“El crecimiento profesional personal de nuestros colaboradores va de la mano con el desarrollo de la compañía; por eso, buscamos implementar acciones para fomentar un entorno de trabajo meritocrático, innovador, diverso e inclusivo”, coincide Cristián Kaiser, gerente de recursos humanos de Falabella Financiero, y quien lidera el área de talento y cultura para todo el ecosistema Falabella.

Este último agrega que en línea con la estrategia de transformación del negocio, Falabella desarrolla “una cultura interna ágil para potenciar el desarrollo y atracción de talento, con programas de desarrollo y pasantías que potencien las capacidades profesionales y fomenten la movilidad interna, con la posibilidad de asumir nuevos desafíos en los países donde operamos: Chile, Colombia, Perú, Brasil, Uruguay, Argentina, México, China e India”.

Por su parte, Felipe Alvarado detalla que Bci persigue “asegurar que nuestro talento sea una ventaja competitiva en la estrategia de transformación del banco. Fomentando el aprendizaje continuo y la mentalidad de crecimiento, garantizamos el desarrollo de los conocimientos, habilidades y actitudes que movilicen a cada colaborador a mantenerse relevante y vigente. Queremos asegurar una experiencia inigualable que potencie lo bueno de la vida con lo mejor del trabajo”.

En ambas estrategias, una coincidencia es el marcado énfasis en la formación digital. “En Falabella debemos navegar en un mundo que avanza hacia lo tecnológico, para lo que es necesario liberar todo el potencial de nuestros recursos físicos y digitales, generando capacidades dinámicas y escalables con el desarrollo del talento como una de las claves”, afirma Kaiser.

Alvarado agrega que “dada la aceleración y el impacto que tiene la transformación digital y las demandas para consolidar nuevas capacidades tecnológicas y ágiles, existe el desafío de actualizar, especializar y habilitar el talento. Nos proponemos evolucionar constantemente, explotando nuevas áreas de aprendizaje y ampliando la participación a más colaboradores”.

Universidad Bci: talento digital, negocios y cultura

Bci ha concentrado su ecosistema formativo en la Universidad Bci, “una solución tecnológica basada en inteligencia artificial y machine learning que reúne todas sus ofertas formativas, en función de las necesidades de cada colaborador, y que cuenta con tres facultades”, explica Felipe Alvarado.

La primera es la facultad de talento digital, que busca potenciar, especializar y acelerar las carreras de los colaboradores que pertenecen al mundo digital, de manera que puedan prepararse para futuros desafíos con el autodesarrollo de conocimientos, competencias y experiencias clave.

Entre las iniciativas de formación digital, Bci diseñó el programa Mach On-Demand (MOD), un fondo concursable que se abre tres veces al año y cuyos participantes también asisten al MachInnovation Summit, una “cumbre” de gestión de conocimiento, donde ayudan a difundir y sensibilizar los mensajes relevantes de su capacitación.

“Fue una experiencia increíble de principio a fin”, señala Fabián Peñailillo, jefe de producto en Mach, quien hizo un curso de datamining a través de MOD.

“Mientras estaba estudiando, me tocó liderar un proyecto, y lo que aprendía me iba sirviendo para entender el contexto general de los procesos, el lenguaje y cómo interpretar la información; no sé cómo lo hubiera hecho sin este apoyo”.

Unos meses después de haber terminado el curso y el proyecto, asumió un rol de mayor responsabilidad en la corporación, “lo que no sé si podemos atribuir en un 100% al programa, pero sin duda fue de gran ayuda”, afirma.

Hoy está esperando el próximo proceso MOD para postular a un curso de la Universidad de Wharton.

Mentalidad transversal

El segundo pilar es la facultad de negocios, que busca profundizar las habilidades y conocimientos de aquellos colaboradores que deben empatizar y satisfacer las necesidades de los clientes.

Y en forma transversal, se desarrolla la facultad de cultura, liderazgo y mentalidad, “que busca inspirar y promover la forma en la que hacemos las cosas y la mentalidad que necesitamos desarrollar para el futuro en Bci”, afirma Alvarado.

Además, el banco abre dos veces al año la postulación a becas de postítulos, posgrados y certificaciones, que financian hasta el 70% del arancel. Asimismo, ofrece 260 cupos para completar estudios técnicos y universitarios, donde la organización cofinancia el 50% de la matrícula anual.



Fuente: El Mercurio